No sólo están en el ardiente llano venezolano que describió Miguel Otero Silva.
Los almacenes cerrados, las calles vacías, las tristes miradas de ese pueblo frío, abandonado,
cuyo mayor atractivo es su Cementerio,Tulcán, tambien se descibe entre las casa muertas.
Como un efecto dominó las casas se van muriendo del Carchi al Macará.
De Salinas al ITT.
Que pasó con el milagro ecuatoriano?
Lo mató la enfermedad de las Aguas Negras,
y cuanto ha tenido que ver en su razón de morir,
el Bufalo vil, el hacedor megalómano,
el narcisista bravucón.
El milagrero de los sábados?
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